“¿De verdad existe el oro negro?”.
Esta es una de las preguntas que más nos han hecho a lo largo de los más de 35 años que llevamos en el sector de la alta joyería. Y lo cierto es que para muchos, el oro negro es un gran desconocido.
Lo primero que tenemos que aclarar es que el oro negro como tal no existe. El único oro original, el que nace de la madre naturaleza es el oro amarillo.
Es por eso que no existe el negro de forma natural, no lo encontramos directamente en ninguna mina; así como no encontramos tampoco ningún otro tipo de oro, ni oro rosa, ni oro blanco.
Para obtener la tonalidad oscura característica del «black gold», tratamos la superficie de la pieza de oro amarillo y le aplicamos un rodio negro que le da ese color tan característico.
Es decir, todas las piezas de alta joyería realizadas en oro negro, ya sean anillos de compromiso o alianzas de boda, han sido creadas con oro amarillo y posteriormente se les ha aplicado un rodio de color negro.
Si hay un color que desprende elegancia, sobriedad y sofisticación, éste es sin duda el color negro.
Y si lo unimos a la belleza de la alta joyería, el resultado es puro amor.
Podríamos considerar todas las piezas de joyería creadas en oro negro verdaderas obras de arte.
Y es que lo cierto es que es un color que transmite pasión, deseo y atrevimiento. Una apuesta rompedora, apta para una mujer del s.XXI y deseosa de formar parte de vuestro día a día.
Es por eso que desde Clemència Peris apostamos por la joyería en oro negro como joyería cotidiana. Atrás ha quedado eso de “guardar las piezas de alta joyería” para eventos especiales y sacar a relucir un anillo de diamantes solo para bodas.
Las cosas han cambiado y a las mujeres nos gusta estar guapas y sentirnos bien cada día del mundo. Las joyas en este tipo de oro son perfectas para lucirlas tanto en looks más formales como en looks más casuals. Nuestra diseñadora, Clemència Peris, fue pionera en usar el oro negro para la creación de diseños de alta joyería.
Apostando así por las alianzas de boda en oro negro, por los anillos de diamantes y oro negro, y posteriormente por los anillos de compromiso en esta tonalidad. ¿Habéis visto alguna vez un solitario de compromiso en oro negro?
Aquí lo tenéis. Innovación en estado puro. Un diseño totalmente nuevo en el mercado que muy pocos se han podido imaginar alguna vez.
Hay que aclarar que al tratarse de un rodio, este tipo de oro requiere un mantenimiento para que la pieza en cuestión siempre luzca perfecta, como el primer día. Normalmente se recomienda volver a rodiarlo una vez al año aproximadamente.
Todo dependerá del uso que se le dé al anillo de oro negro.
En este link encontraréis un vídeo en donde, Mariona Serrat, experta en alta joyería, nos desvela las ventajas y las características de los anillos de compromiso en oro negro; y nos lo muestra con un ejemplo. A continuación, hemos seleccionado alguna de las piezas más destacadas de nuestra colección.
Se trata de anillos de diamantes en oro negro. Muchos con la finalidad de ser usados como anillos de compromiso y otros para convertirse en alianzas de boda.
¿Cuál de estos anillos de oro negro y diamantes os ha gustado más? Como habéis podido comprobar, el oro negro tiene la magia de hacer resaltar la luminosidad de los diamantes. El contraste que se crea entre el metal y la piedra preciosa hace resaltar el brillo de los diamantes haciendo que estos deslumbren a todo aquel que los mire.